Después de una semana agitada, con tarea y trabajos en exceso debido a una organización deficiente y una carga de trabajo en excedente estamos de regreso y con una historia más que me dice: "sí se puede".
En un reino muy lejano donde no existen las montañas y el viento trae las noticias de las islas Feroe, existía un príncipe el cual no encontraba a su amor. Creció con todos los honores que su estirpe le demandaba: estudió en el ejército, tenía talento para las bellas artes y viajaba por todo el mundo.
Un día nuestro príncipe se encontraba en tierras australes y fue su interés por el deporte lo que hizo que conociera al amor de su vida. Así, durante los Juegos Olímpicos de Sydney en el año 2000, Mary, proveniente de la isla de Tasmania, se volvió en la persona quien ocupara el corazón de Frederik hoy príncipe de Dinamarca.
Como toda historia de amor, el destino hizo que Frederik tuviera que regresar a su tierra natal y tuviera que abandonar a Mary. Sin embargo, el amor fue más fuerte y ella abandonó su trabajo para estar con quien prometería amarse durante toda una vida.
Esa historia es tan verdadera como la mía, se parecen tanto...
Los 7 husos horarios me la pena, ¡sí se puede!
... he escuchado muchas historias de amor, con finales felices, sin embargó ésta es la mía...
mood: reflexive & soft
audio: Hanson.Thinking of you
extra: Me urgía un día de puente como el de mañana
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